BOOOOOM. Cayó MEJOR MARCA PERSONAL en 10K en San Sebastián el pasado domingo día 28 de noviembre en la Zurich Maratón San Sebastián, parando el crono en 35:53, es decir a una media de 03:35 el kilómetro. Contento contentísimo, pero bien es cierto que hay que seguir entrenando porque nuestro objetivo es otro. Nuestro objetivo es Maratón de Sevilla y esto era un test.
Y es que, quien me ayuda en la preparación me propuso hacer un test de 10km justo el 28 de noviembre. Le dije que había uno en San Sebastián y como me pilla cerca, con estancia acogedora en Guipúzcoa y un recorrido en el cual ya he corrido tanto la media maratón en 2017 como la 10K en 2019, pues listo, inscripción y a rodear en rojo en el calendario, 28 de noviembre a San Sebastián.
Viaje relámpago. Toda la semana hablando de temporal, lluvias y aire, incluso nieve. El viernes anuncian que cierran la A-15. Genial. Tocará dar rodeo. Y el sábado lo ponen todavía más chungo, así que tras ver el partido del peque, como un plato de pasta para las 12 de la mañana y viajecito hasta San Sebastián. En el Carrascal comienza a nevar, pero estaba bien. Algo peor se puso por la tarde por las fotos y vídeos que pude ver.
La carretera estaba genial. Parada en el pueblo de mi hermana a tomar un café con ella y a por el dorsal a Donosti para que no se nos haga muy tarde. A diferencia de otros años, ésta vez la recogida es en el Reale Arena, que por cierto, sólo recogida el sábado. No daban opción ni a recoger en otro lugar los días anteriores, ni a recoger el día de la prueba..... un poquito de facilidades al corredor, no creo que cueste tanto, ¿no?
Lo bueno de recogerlo en persona es que pudimos acceder a las gradas del remodelado estadio y verlo por dentro. En la feria, se me pusieron los dientes largos, no, larguísimos al ver las 5 zapatillas para maratón que había en la exposición. Buuuufff, las he requetemirao por internet, pero tener esa ligereza en la mano, no quiero imaginármelas en los pies.
Pasamos por el velódromo. Ya que estábamos y se veía movimiento pues para adentro. Vimos un par de pruebas. No me preguntéis como se llama, pero ahí salían todos a la vez y daban una vuelta "normal" y en la siguiente eliminaban al último. Así hasta quedar uno. Que manera de rodar y que velocidades. Curioso.
Tarde de sofá y de hablar con la hermana de todo un poco, descansar y a cenar para irnos pronto a la cama, al día siguiente tocaba madrugar ya que la carrera era a las 8:35 y teníamos un cachito en coche hasta la capital guipuzcoana.
Dejamos bolsa en el parking del antiguo Anoeta, calentamos allí mismo al resguardo y a falta de 20' vamos para la salida. La temperatura buena, no me dio sensación de frio. Alguna fotillo que nos hicieron y luego nos las reenviaros por redes sociales y al cajón. Queríamos estar adelante, pero el primer cajón era para los federados vascos que iban a disputar el Campeonato de Euskadi de 10K. Nosotros al segundo, pero en que pudimos pasar nos fuimos para adelante.
Suena Carmina Burana con su famosa "O FORTUNA", falta un minuto para salir y empieza un vendaval que hace moverse a todos los árboles de la Avenida de Madrid, nuevo emplazamiento de la salida, además de comenzar a llover con mucha intensidad. Maite Maiora, Campeona del Mundo de Skyrunning a mi izquierda. Coleccionando Instantes. Profesionales y populares juntos. Esto es bonito. Salida y a correr. Primeros metros con mucha precaución porque entre la gente y los pivotes del carril bici pues no queremos liarla.
Pasamos la primera rotonda miro el reloj y "taaaachaaaaan", se ve que no le había dado a cronometrar. Genial. Le doy en ese momento. Pasamos el primer kilómetro, pero no puedo tomar referencia porque lo había conectado más tarde, así que mi cabeza me dice "hemos venido a correr, así que corre". Poco a poco el grupo se estira y hacia el kilómetro 2 poco más o menos vamos corriendo ya un grupo que mantenemos la posición, así que nos reagrupamos. Se nos une una chica y toca juntarse más para ir en grupo.
Poco a poco nos vamos acercando al centro de la ciudad pero yo no veía puntos kilométricos por ningún lado. Por otra parte, el pulsómetro había empezado a no medirme bien el pulso. Para el ritmo que llevábamos no podía tener tan pocos pulsaciones como indicaba mi Polar M430. Pienso lo mismo de antes. "Corre, que para eso hemos venido". Malo sea que "petemos", pero es que no tenía referencias de nada. Mi referencia iba a ser el kilómetro 5, pasar en torno a 18 minutos, pero para mi que tampoco vi nada señalizado. Algo habría, porque nos cogieron tiempo intermedio. 17:41, pero en carrera no lo sabía.
Por el plano del recorrido, sabía que en la zona del Cursal era ya el kilómetro 5,5 y que de ahí tocaba volver hacia el mini estadi. Para entonces, ya llevaba un rato una segunda chica en nuestro grupo. Al pasar por el Boulevar una de las dos chicas cambia el ritmo y empiezo a ceder uno metros. Va a tocar sufrir y correr solo. Intento poner la vista en el grupo y no ir perdiendo mucha distancia. En las clasificaciones finales me dí cuenta que estas dos chicas fueron 1ª y 2ª. Tuve la suerte de compartir kilómetros con ellas. Jone y Aratz, menudas máquinas y como les animaban la gente que aguantaba el chaparron para vernos pasar por las calles de Donosti.
Por el centro, a pesar de la mala mañana que nos estaba haciendo, aún hay gente para animar nuestro paso. Enfilamos ya los últimos kilómetros. Lo se porque ya la corrí hace dos años. Me alcanzan por detrás otro par de personas y aguantamos ese ritmo. Veo el cartelón de KM20, es decir, 1km a meta para los de la media maratón, pero para nosotros también. Se empieza a ver el Reale Arena y gente, no tanta como en otras ocasiones animando. Toca enfilar la última recta antes de entrar al mini estadio y BOOOOM, aquí BOOOM del grande, del de asustarse un poco y de tener que parar a caminar. Nauseas. (Imagino que de la intensidad). Camino unos metros y cuando pienso que se me han bajado las pulsaciones, de nuevo comienzo a correr para dar la media vuelta al estadio donde dando la curva veo que el crono marca 35:30, así que hay que apretar para ver si llegamos antes del 36. Bajar marca la bajábamos del anterior registro de 36:27, pero si conseguíamos bajar de 36' era ya la bomba. Y fue, y fue..... 35:53, bonito número.
Tras la llegada, rápido a por la mochila para quitarnos los kilos de agua que llevábamos en la ropa y tomarnos un caldo caliente para entrar en calor. Estando allí, apareció Maite, del Beste Iruña, amiga y conocida que justo habíamos hablado entre semana por el tema del dorsal que igual se lo tenía que recoger. Hablando y hablando, me ofrecí para acercarle hasta Pamplona, así que se nos hizo el viaje más ameno acompañados y ella de copilota disfrutando de la nieve, pero yo desde Etxegarate hasta Olite casi sin soltar las manos del volante. La nieve muy bonita, pero para verla desde la ventana o en la televisión.
Tenemos nueva marca personal en 10K, pero seguimos trabajando para Objetivo Maratón. Objetivo Maratón 2022. Objetivo Maratón Sevilla.
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