El pasado domingo 17 de marzo estuvimos en Ayegui, localidad de la merindad de Estella que se sitúa en las faldas de Montejurra (1.042 metros de altitud). Se celebraba la quinta edición de Jurramendi Trail Montejurra, carrera de montaña de 24 kilómetros, valedera para el Campeonato Navarro de Carreras por Montaña en Línea y con un desnivel de 1.700 metros positivos. Paralelamente, hubo otra carrera "Txiki", de 11 kilómetros y 600 metros positivos.
Tocó madrugar un poco ya que la salida era a las 9:00 de la mañana y había que recoger el dorsal. Coche con Santi e Iñaki y para Ayegui. Acercándonos a Ayegui ya vemos la imponente Montejurra. Día despejado, ni una nube por la cima, vamos a gozar y mucho.
Retiramos dorsal, nos preparamos y hacia la salida. El ambiente previo es de lo mejor de la carrera. Hablas con mucha gente, cada vez con más. Hay nervios, chistes fáciles, preguntas, te informas, pero realmente no quieres mas que que den la salida y a correr.
El terreno lo conozco, la carrera como tal no, el perfil bien repasado que considero una de las cosas más importantes a tener en cuenta. Estamos preparados, listos......a disfrutar!!!! Salimos de la Plaza del Rebote con los primeros metros cuesta abajo, así que cuidado y a no liarla mucho con algún tropezón. Tenemos unos 4 kilómetros entre la aproximación y los primeros senderos para ir cogiendo posiciones en carrera además de ir calentando, ya que la primera de las subidas, la de "Los Cascajos" nos va a poner además de en nuestro sitio, firmes para el resto de carrera. Unos 330 metros positivos en apenas un kilómetro hasta llegar a la Ermita de San Cipriano, lugar donde los ánimos de la gente no faltaron. "Hay que correr" me acuerdo que me gritaron, "de eso nada, esto hay que disfrutarlo". Un pasillo de gente que te anima sin parar es para vivirlo.
Descenso rápido y técnico hasta la Ermita de San Sebastián, bordeándola para llegar a uno de los avituallamientos. Seguimos perdiendo desnivel a través de un bonito sendero. Toca reponerse un poco de la subida-bajada, ya que en breve, tendremos otra buena subida. Casi otros 300 positivos en unos dos kilómetros de distancia hasta llegar a una pista forestal que nos permitirá trotar un poco. A partir del kilómetro 9 ya no conozco el recorrido. Pero viendo el perfil, toca controlarse un poco por los varios toboganes que tenemos hasta llegar al "Sendero del Jabato" donde íbamos a perder prácticamente todo el desnivel. Para este momento, en carrera teníamos el "grupo" más o menos formado. Adelantaba y me adelantaban prácticamente los mismos corredores. El "Sendero del Jabato" precioso. Permitía correr en bajada. Continuos escalones. Zona muy frondosa. Atento a ramas, árboles, raíces. Zona sombría y oscura. Y durante mucho tramo corriendo sólo. Pensando en mil cosas, pero a la vez, disfrutando de cada zancada.
Nos encontramos ya en el kilómetro 14 y más o menos, hasta el 17 donde comienza la Hoya de la Cal se puede correr, pero sin pasarse porque sabemos lo que nos espera con esa subida. 1'5 km, pendientes del 30%, y otros 300 metros positivos. Conocemos también esta subida, así que pasamos el punto de cronometraje y al lío. Esta subida no permite hacer mención de trotar. Caminar y lo justo. Vamos unos 6 corredores juntos haciendo la ascensión. Unos que vamos cogiendo, otros que vamos dejando. A la altura de las agujas del Gudari noto mis piernas como rocas, no puedo seguir el ritmo de los de adelante y me voy descolgando. Tras un falso llano, volvemos a subir desnivel para llegar de nuevo a la Ermita de San Cipriano. Menos gente que antes porque el día había empeorado. Momento en que me alcanza la primera de las chicas, Enara Oronoz. Todavía nos queda ascender un poquito más hasta las antenas y las piernas siguen como rocas. Además, nos recuerdan que "ya sólo es bajada". Si, si.....pero 6 km de fuerte bajada donde el agotamiento, la falta de fuerza y ver que en ediciones anteriores corredores que mas o menos hacen los mismos tiempos que yo, son más de 30' reteniendo cuádriceps, así que no es ninguna broma.
Bueno, pues eso, a descender....por delante pista de hormigón, pista forestal y senderos, bonitos senderos. En uno de ellos adelanto a AIORA, niña con la que Jurramendi Trail colaboró y que un grupo de voluntarios hicieron el recorrido de la Txiki Trail portándole en una silla especial. Increíble.
Nos quedan ya los últimos kilómetros. Miro el reloj y vamos ya por el 21. Hemos perdido todo el desnivel y ya estamos por las faldas de Montejurra. "Sólo" nos quedará volver al pueblo por camino rural, en bajada y a la velocidad que las piernas nos permiten, no dan para más. Pasamos por el Monasterio de Irache y la Bodega Irache (pienso que luego volveré a comer a esas mesicas que había en esos jardines), entramos en Ayegui, pequeña pendiente de subida, busco a "mi tambor" por si está sonando entre la multitud de gente en la llegada, pero lo que oigo es un grito de "venga Ale.....", mi hermana, mi sobrino y mi cuñao, 75 kilómetros para verme llegar a meta y estar después un par de horicas juntos comiendo. Sorpresón. Subo por esa alfombra azul que nos han montado y finisher Jurramendi Trail Montejurra. Otra más para contar.
Avituallamiento en meta. Ducha en el polideportivo Ardantze. Vuelta de nuevo a la Plaza del Rebote a por un "pintxico" de panceta y un "vasico" de vino, buscando a compañeros, amig@s y conocid@s para ver que tal les ha ido.
Un trago en el bar Cipriano, visita al Monasterio Irache por fuera, visita a la Bodega Irache por fuera y a su particular "Fuente de Vino", la cuál probamos para comer en el merendero junto al monasterio. Ya por la tarde visita a un gran amigo en Estella y de paso conocer más la Ciudad del Ega.
En lo personal de la carrera, puesto 51 de la general, 50 de la categoría con un tiempo de 2:35:41. La cronoescalada de la Hoya de la Cal la hice en 17:16, siendo el 52 en conseguir el ascenso. Fue la primera carrera que hice con chaleco de hidratación y la sensación fue buena ya que me permitió llevar agua e hidratos en forma líquida, además de los geles y las sales. Con el cinturón sólo me permite llevar agua que para carreras más cortas me es suficiente.
En lo personal de la carrera, puesto 51 de la general, 50 de la categoría con un tiempo de 2:35:41. La cronoescalada de la Hoya de la Cal la hice en 17:16, siendo el 52 en conseguir el ascenso. Fue la primera carrera que hice con chaleco de hidratación y la sensación fue buena ya que me permitió llevar agua e hidratos en forma líquida, además de los geles y las sales. Con el cinturón sólo me permite llevar agua que para carreras más cortas me es suficiente.
Carrerón el que tienen montado en Ayegui.
- FOTOS AROSPORT FACEBOOK. (AQUÍ).
- TRACK WIKILOC. (AQUÍ)
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