Que buen sabor de boca se me queda y que ganas de repetir, no se si en la misma o probando otras, pero la sensación fue buena no, lo siguiente.
Iba preparado. Y es que en el arrebato de inscripciones a carreras que comenté en otra ocasión, Roman Race Cascantum, Leyre Trail y Media Maratón Donosti, que más que arrebato fue la programación para una planificación de llegar a la Media Maratón con un buen estado de forma, además de la Carrera de Autol. Esto en cuanto a carreras se refiere, porque después hay que sumarle un sin fin de entrenamientos mañaneros, madrugones, ver amaneceres, fríos, aires y poquita lluvia, la verdad, pero el objetivo lo tenía claro, ir a San Sebastián y disfrutar de la carrera, el trabajo duro estaba hecho y la recompensa iba a estar en poder correrla y poder disfrutarla a la vez.
Todo empieza en Agosto, cuando ya me veo que puedo correr decentemente y sin molestias del tobillo que tanta guerra me dió desde septiembre del año pasado. Me veo incapaz de correr por terrenos irregulares, así que le doy prioridad al asfalto. Como me amoldo a todo y tengo la suerte o la desgracia de que me gusta practicar muchos deportes, pues me marco un objetivo para este otoño, que no es otro que la Media Maratón de Donosti, prueba que tenía en mente para el pasado año, pero que no pudo ser.
Tanto en fiestas de Falces, como en las de Peralta comienzo con salidas suaves de madrugada para aprovechar y ver los encierrillos, cómo han cambiado las fiestas, a mejor, más horas de día y menos de noche.
Tras esas semanas, tengo pendiente una prueba de esfuerzo, en el Centro de Medicina de Naturalium en Peralta. La realizo en cinta y los resultados son buenos. Con el informe en la mano, ya puedo establecer unos ritmos de entrenamiento basados en las pulsaciones.
Me quedan 10 semanas para la media maratón. Me programo 3/4 sesiones por semana de entrenamientos de correr, además de compaginarlos con algún día de natación y algún que otro partido de pádel.
Esa misma semana, 24 de septiembre, participo en Roman Race Cascantum. Carrera de obstáculos muy divertida, que el ritmo de carrera fue normalito, pero me permitió volver a disfrutar del barro y de ir cogiendo buenas sensaciones.
En las tres semanas siguientes, sigo con el plan de entrenamiento, pero meto más desnivel y monte, porque para hacer el fin de semana alguna tirada larga y aprovechar que hay buenas carreras por Navarra, estaba inscrito a Leyre Trail, carrera muy técnica a la cual acudí a realizar un buen entrenamiento de calidad, disfrutar del monte, pero sobretodo a no lesionarme. Objetivo cumplido.
A partir de aquí, ya todas las ilusiones puestas en San Sebastian. Faltaban 5 semanas de preparación e iba cumpliendo más o menos el programa. Al fin de semana siguiente, prueba de fuego en asfalto. 8 km en Autol, con dos grandes cuestas por vuelta y la carrera me sale rápida para haber cuestas, clavaditos los 32', a 4xKM.....jejjejj. Que coincidencia.
Entramos ya en el mes de noviembre, mes decisivo y super divertido con la organización del Torneo de Pádel Solidario con la Asociación Española Síndrome de Sturge Weber. Da para todo. Con el apoyo familiar, claro. Organización, entrenamientos, trabajo, ........
Finaliza el torneo el día 19 y sólo falta una semanica para el objetivo. La tarea está hecha, solo queda llegar descansado al finde, así que esa semana un entrenamiento el martes y otro el jueves, en el que quedo con un amigo/alumno para, curioso, me lleve despacio....si voy a su ritmo, se que iré despacio, está empezando, pero fue divertido.
Viernes, que nervios, se acerca el finde. Descansamos bien, y el sábado para San Sebastián, con parada previa en Beasain para ver al sobrino jugar a baloncesto, ha empezado el deporte escolar y hace ilusión verle. De ahí, a San Sebastián para ir teniendo toma de contacto con la prueba.
Aparcamos cerca de Anoeta, los dorsales se recogen en el Velódromo situado en la parte trasera del mismo. Nunca había estado en una carrera con semejante infraestructura, así que todo lo que veo me ilusiona. Entramos al Velódromo y el "Ongi Etorri" que han preparado es espectacular. Hay poquita gente recogiendo el dorsal y aprovechamos para coger el peque el suyo y yo el mio, ya que va a correr la Maratón Txiki esa misma tarde. Si yo tengo ilusión, no os podéis imaginar la que tenía Unai.
Recogemos camiseta txiki para Unai y bolsa del corredor mía. La suya es chulísima y se la quiere poner ya para correr, pues adelante, todos de amarillo. Nos hacemos unas cuantas fotos y ya para el mini estadio, lugar donde se va a celebrar las carreras infantiles y al día siguiente, lugar donde llegaremos nosotros.
Cámara de llamadas para los niños, y a la pista de atletismo. En principio, hay muchos niños y muchos padres. Unai corre sólo y me voy hacia la meta para poder verle/grabarle su carrera. Que artista, llega, cruza el arco y levanta los brazos.....le busco y le pregunto que tal...su respuesta...
Genial, casi gano papá, he corrido como rayo MacQueen y he adelantado a dos al final. jajjajjaj.
Casi gana, detrás de los 37 que habían entrado delante de él. Quiere fotos en el arco, en la pista y con su pedazo merienda que le han dado. Agua, yogurt, galletas....
Regresamos a Beasain para dormir y descansar, porque al día siguiente toca madrugar y mucho. Al llegar, mi hermana me dice que también vendrá a San Sebastián a animarme, genial, más afición.
Suena el despertador. Arriba, es el día, es el momento de volver a despertarse con un mensaje de automotivación, HOY PUEDE SER UN GRAN DÍA, Alex.
Con nervios en San Sebastián y gusanillo de los que no se van hasta que no empiezas a calentar, me despido de hermana, mujer e hijos para ir ya hacia la salida. Llueve, pero el poncho de plástico de usar y tirar es el gran aliado en esos momentos. La gente se agolpa en cualquier rincón con tal de estar a cubierto, pero cerca de la salida, hay dos grande puentes que nos dan cobijo durante el tiempo de espera.
A las 8:45 dan la salida para los que van a realizar los 10KM. Una vez se han marchado, empieza a aparecer gente y gente y más gente por todos los rincones. Estoy en el segundo cajón, el de 1:20:00 a 1:30:00. Esto va a comenzar yaaaaaaaaaaa!!!!
Dan la salida y como es lógico con tanta gente, apenas se puede correr. Voy buscando una banderola del Peralta Atlético que debía ondear cerca de Anoeta y sí, ahí está mi afición, ellos no me ven, pero les grito. Entre tanta gente, hace ilusión verles. La carrera comienza lenta, con mucho tapón y mucha aglomeración de gente, algunos incluso saltando las medianas y tratando de ir por las aceras. Pita el primer km y 4:06....la idea es ir a 4:00, pero no se puede correr más, los de adelante están en las mismas.
Volvemos hacia la zona de Anoeta y de nuevo, banderola entre el público y esta vez si que me ven mejor. Ahora si que sí, ya no les veré hasta el final de carrera. Poco a poco se va estirando el grupo y ya hay huecos para poder correr. La carrera transcurre por avenidas ya más anchas y me voy colocando en el ritmo que quiero llevar, sobre todo por pulsaciones.
Tras pasar por delante del Hotel Amara, marca el kilómetro 5 de carrera y el pulsómetro 19:22 y 162 pulsaciones. Muy bien. Voy por debajo de lo esperado y las pulsaciones son las que debo llevar.
Momentos después, pasamos por delante de la Catedral del Buen Pastor, lo justo da tiempo a mirar y comienzan a escaparse gotas de lluvia. Son solo 5' pero cae fuerte. Final del Boulevar para cruzar el Puente de Zurriola y presentarnos delante del Kursal. Música de fondo y es que tanto a la ida como a la vuelta tenemos avituallamiento.
Recorremos todo el paseo de la Zurriola y parte de la Avenida Navarra donde nos encontramos con un giro de 180º para volver por el mismo camino que ya hemos realizado. La carrera marca el KM 9, el pulsómetro 34:47, y hay avituallamiento, así que primer gel. De normal cada 45', pero esta vez lo había planteado antes. Realizamos todo el Paseo del Boulevard, Ayuntamiento y aparecemos en la Concha, previamente, con el paso del kilómetro 10. Este hay que verificarlo, 39:20 en la pantalla, (algo menos porque ese es el de la salida de la carrera). Vamos bien, vamos muy bien, pero esto es largo. El grupo de carrera está consolidado, vamos 5 personas juntas, a poca distancia va otro grupo, pero cualquier cambio de ritmo te puede costar caro.
Vamos por el Paseo Mirakontxa, pues eso, Mira Kontxa, por un par de veces miré al mar, no pude más, la carrera continuaba y a esto, una chica, jovencísima, nos alcanza, se pone a la par, nos adelanta, tira del grupo y poco a poco se va.....en el grupo ha habido un pequeño acelerón, pero yo personalmente no lo podía mantener, a 168 se habían subido las pulsaciones, eso era demasiado para el KM 11.
Tras pasar el túnel del paseo, otra avenida larguísima (Zumalakarregui), Plaza de Europa y Avenida de Tolosa, aquí veo por primera vez al compañero de equipo, Marcos Burdaspar, que ya está volviendo por el km 14,5 y yo voy por el 13,5. No me da para animarle. Aquí, paso un momento de desconexión, hacemos un giro de 180º y con el compañero que iba me mira hacia atrás como diciendo que me estaba quedando, iba bien pero el giro y el repecho del puente me había hecho perder un poco de ritmo, o eso parecía. porque los tiempo no marcaban eso.
Kilómetro 15. 59:01, en mi crono algo menos. 164 pulsaciones, nos mantenemos igual y voy por debajo de 4' el km, no está mal. Aprovecho para gel, sales y avituallamiento. Estamos volviendo por el mismo recorrido que hemos ido anteriormente y volvemos a pasar por el túnel entre la Playa de Ondarreta y la de la Concha.
Hacia el kilómetro 17, nos coge el grupo de 2:45 en maratón. Va un grupo numeroso y trato de meterme dentro del grupo para ver si puedo mantener el ritmo. Nos acercamos de nuevo a la zona de callejeo y aquí se acumula mucha gente animando y aplaudiendo. En esto momentos, voy como en una nube. Estoy dentro del grupo, no veo mucho y sólo pienso en correr. Van pasando los kilómetros y se va acercando el final. He conseguido mantenerles el ritmo hasta el kilómetro 20 y ahí me he empezado a descolgar, pero estoy en el 20, queda sólo uno y veo el arco de salida, veo Anoeta y veo el desvío de la maratón (continuar 2ª VUELTA) o a la derecha para bordear Anoeta, bordear el miniestadio y entrar a la pista de tartán para realizar media vuelta al miniestadio. Mirada a la grada y rápido vistazo a la banderola, ahí los tengo, los grandes campeones de esta carrera animando sin parar porque su papá, su tato y su marido está cruzando la línea de meta y por debajo de lo esperado, además de con buena cara y con sonrisa que no falte. Tiempo neto 01:22:41. No se puede estar más contento.
Recogida de medalla finisher, avituallamiento de meta, té, caldo.....y a buscar a la familia. Cuánto les quiero y cuanto me apoyan.
Ya tras la carrera, hay que disfrutar de lo bonito de la ciudad. Pintxos, comida y paseo por la Concha.
¿Que más se puede pedir?
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